Para la nueva agenda internacional de desarrollo sostenible, la educación y la igualdad de género constituyen preocupaciones básicas. El Marco de Acción Educación 2030, suscrito por la comunidad educativa mundial en noviembre del 2015, en sintonía con la agenda para los ODS, reconoce que la igualdad de género está íntimamente ligada al derecho a la educación para todos y que para alcanzar la igualdad de género se requiere un enfoque que “garantice no solo que las niñas, los niños, las mujeres y los hombres obtengan acceso a los distintos niveles de enseñanza y los cursen con éxito, sino que adquieran las mismas competencias en la educación y mediante ella” (UNESCO 2016a, p.28). Todas las mujeres, las niñas, los niños y los hombres han de tener la posibilidad de participar activamente en la sociedad, de que se oigan sus voces y se satisfagan sus necesidades (ONU-Mujeres, 2016a).
Para facilitar y alcanzar estos objetivos, es necesario disponer de conocimientos basados en evidencia, acerca de los temas relacionados con el género en el ámbito de la educación y mediante ella. El Resumen sobre Género del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (Informe GEM) identifica y se centra principalmente en los desafíos a los que han de hacer frente las niñas y las mujeres a causa de las desventajas globales y desproporcionadas que siguen experimentando en su período de formación y después de él. Pero tiene presente asimismo que los niños y los hombres pueden sufrir desventajas de género, y que la igualdad de género también afecta a los varones, a sus relaciones y al poder. Por tanto, todos debemos participar en lograr la igualdad de género.