El Programa Mundial de la UNESCO de Evaluación de los Recursos Hídricos reúne el trabajo de numerosos miembros y socios de ONU-Agua para producir la serie de informes de las Naciones Unidas sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo.Los informes anuales sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo se centran en cuestiones estratégicas relacionadas con el agua.
Los miembros y socios de ONU-Agua, así como otros expertos, aportan los últimos conocimientos sobre un tema específico.La edición de 2019 del Informe Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos pretende informar a los responsables de las políticas y de la toma de decisiones, tanto dentro como fuera de la comunidad del agua, de hasta qué punto las mejoras en la gestión de los recursos hídricos y el acceso al suministro de agua y a los servicios de saneamiento son esenciales para superar la pobreza y afrontar varias otras desigualdades sociales y económicas.
En un mundo cada vez más globalizado, los impactos de las decisiones relacionadas con el agua cruzan las fronteras y afectan a todas las personas. Los eventos extremos, la degradación del medio ambiente, el crecimiento demográfico, la rápida urbanización, unos patrones de consumo insostenibles e injustos y unos flujos migratorios sin precedentes son algunas de las presiones interrelacionadas a que se enfrenta la humanidad, y que a menudo golpean con mayor dureza a quienes se hallan en situaciones vulnerables a través de sus impactos en el agua.Abordar las desigualdades a que se enfrentan los grupos desfavorecidos requiere soluciones a medida, que tengan en cuenta las realidad
es del día a día de la gente y las comunidades en situaciones vulnerables. Políticas bien diseñadas y adecuadamente aplicadas, un uso eficiente y apropiado de los recursos financieros, así como un conocimiento de los recursos hídricos y las cuestiones relacionadas con el agua basado en la evidencia también son vitales para acabar con las desigualdades en el acceso al agua potable y al saneamiento seguros.
El informe, titulado “No dejar a nadie atrás”, refuerza los compromisos asumidos por los Estados miembros de la ONU al adoptar la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y al reconocer los derechos humanos al agua potable y el saneamiento seguros, ambos esenciales para erradicar la pobreza y construir unas sociedades prósperas y pacíficas.